La larga cola del podcasting
enero 13, 2010 Deja un comentario
En octubre de 2004, Chris Anderson acuñó en un artículo para la revista Wired la expresión The Long Tail o Larga Cola, a fin de describir los modelos de negocios emergentes en Internet. En esta nota hablo un poco sobre cómo este concepto se aplica a los medios de comunicación en la Web, y particularmente a los podcasts.
Anderson sostiene en The Long Tail que Internet y entorno digital han cambiado las reglas del mercado, dado que permiten la reducción en los costos de almacenamiento y distribución, y que por tanto, ya no es necesario focalizar el negocio en unos pocos productos masivos.
Como resultado de este nuevo modelo, ahora existen dos mercados: uno centrado en el alto rendimiento de unos pocos productos, y otro basado en la suma de todas las pequeñas ventas de muchos productos, el cual puede igualar o incluso superar al primero. Uno representa al antiguo mercado de masas, y el otro a los nuevos nichos de mercados (Fuente: Wikipedia).
¿Cómo podríamos aplicar este concepto de la Larga Cola a los medios de comunicación y su evolución en la Web? Por un lado tenemos a los medios de comunicación tradicionales y masivos, cuyo modelo se basa en la captación de una gran audiencia, a la cual ofrece una programación tan variada como sea posible, a fin de satisfacer a la mayor cantidad de gustos.
En Internet, estos medios tradicionales son los grandes medios reales convertidos en virtuales (prensa, radio y televisión), y que se han dedicado básicamente a copiar y pegar sus contenidos en portales de noticias y entretenimiento, y canales para la reproducción de sus contenidos en audio y video.
Por otro lado tenemos a los medios de comunicación emergentes, los cuales han aprovechado dos grandes ventajas que brindan hoy las nuevas tecnologías: La reducción de los costos de producción, gracias a equipos técnicos y programas informáticos cada vez más accesibles, tanto en costo como manejo; y la reducción en los costos de distribución, gracias al abaratamiento de los servicios de almacenamiento y conexión en la Web, los cuales cada vez ofrecen mayor capacidad y velocidad.
Gracias a esto, los medios de comunicación emergentes pueden segmentar a las grandes audiencias en múltiples nichos, alargando de esta manera la cola del mercado. Esto es posible, repito, debido a que los costos de producción y distribución en la red permiten la entrada de nuevos jugadores, quienes no requieren de una fuerte inversión para llegar a su público meta. En este reparto de nuevo actores se mezclan tanto pequeñas y medianas empresas, como emprendedores y entusiastas solitarios.
Este nuevo modelo se aprecia con claridad en los podcasts. Para ilustrar esta idea, me referiré a un nicho que he llegado a conocer bien como consumidor de podcasts: El diseño gráfico. Existe una gran cantidad de podcasts para diseñadores gráficos (sobre todo tutoriales). Dentro de este nicho que llamaré “A”, y que difícilmente sería abordado por un medio de comunicación de masas, se encuentra un nicho “B” compuesto por los podcasts dirigidos a los diseñadores gráficos, y que usan la suite de programas de Adobe.
Ese nicho “B” se divide a su vez en un nicho “C”, donde hay podcasts que se ocupan individualmente de alguno de los programas de Adobe (Photoshop, Illustrator, o InDesign). Llegado a este punto, la cola se sigue alargando, y nos encontramos con un nicho “D” en el que se sitúan, por ejemplo, los podcasts dedicados a Photoshop, pero con énfasis a los diseñadores que utilizan esta herramienta para video o fotografía.
De esta manera, los podcasts ejemplifican muy bien el surgimiento de nuevos medios de comunicación, creados por empresas o particulares, quienes son capaces de ofrecer sus contenidos a públicos muy particulares.
Queda por ver en el futuro si la suma de estos múltiples y pequeños nichos es capaz de superar en audiencia y rentabilidad a los medios de comunicación tradicionales que han ingresado en la Web, pero tal vez eso no sea necesario, ya que para el medio de comunicación emergente será suficiente mantenerse y crecer en su propio nicho.